viernes, 8 de noviembre de 2013

Cap. 77 -Penúltimo día y algo más

Penúltimo día de internado. La gente andaba de aquí para allá recogiendo y metiendo cosas en la maleta.
En la habitación de Irene, ya casi habían acabado, menos Adel, que le estaba costando cerrar la maleta de tanta ropa que había comprado ese año.
El aire de la habitación era triste, pero a la vez feliz. Todas tenían ganas de irse y pasar unas buenas vacaciones, pero también querían quedarse.
-Y...-dijo Mireya cerrando la cremallera de su maleta-¡Ya he acabado!
Las demás la miraron y sonrieron.
-¿Ayudo a alguna? -se ofreció ella.
-A mi, porfa, no consigo cerrar esta maldita maleta -gruñó Adel.
Mireya se puso a ayudarla plegando mejor la ropa para que hubiera más espacio y se pudiera cerrar fácilmente.
-Yo también he acabado -anunció Irene, depositando su maleta en el suelo.-Voy a ver como van por otras habitaciones.
Abrió la puerta y fue pasando por el gentío de gente que había por los pasillos arrastrando las maletas.
Entre la gente, reconoció a Claudia.
-¡Claudia! ¿A donde vais con las maletas?
-Hay que bajarla abajo; no me preguntes porque -respondió.
Irene le agradeció la información y volvió a su habitación para coger la maleta y bajarla.
Avanzó lenta entre la multitud, hasta que al fin llegó al jardín y se sorprendió al ver tantas maletas en fila.
Dejó la suya también y vio que podía hacer. De repente, se acordó de que aún no se había despedido de Dani.
Buscó su móvil en el bolsillo pero no lo tenía.
Murmuró unas palabras malsonantes y se fue corriendo hacia arriba, esquivando a todas las personas.
Lo cogió y llamó a Dani. Al principio no lo cogía, pero después de varios "Bips" respondió:
-Hola Irene.
-¡Dani! -exclamó esta.-¿Vas a venir?
-Sí, sabía que me llamarías para esto -su voz sonó divertida.
-¿A qué hora?
-Ahora mismo, estoy yendo...
-Ah vale, pues voy a la entrada.
-Vale, est...¡Au! -exclamó Dani, molesto.
-¿Qué pasa?
-Nada, que me he chocado contra una farola, bueno, nos vemos. Adiós -se despidió Dani, irritado por el golpe que se había dado.
Irene se rió y colgó.
Emprendió el camino hacia la entrada, y mientras, se le ocurrió crear un chat de grupo con Mireya, Carol, Nicol, Adel, Natasha, Claudia...Para así en verano poder hablar entre todas.
Tras crearlo y poner algún mensajes, se guardó el móvil y vio la silueta de Dani a lo lejos.
Esperó hasta que llegara, y le dio un abrazo.
-¿Estás bien? -le preguntó, tiernamente.
-Sí sí, la próxima tendré que tener más reflejos.
Entraron hacia dentro.
-Irene, una cosa, no te lo he dicho aún, pero...Yo en septiembre ya empezaré la universidad, ya que este año no he ido.
-Me lo esperaba, pero, ¿Y? -susurró, imáginandose la respuesta.
-Pues que no estaré tanto contigo, y no me pasaré por aquí...casi nunca -susurró, dolido.
-N-no pasa nada.
-Pero, igualmente, algunos findes nos veremos -intentó remediar él
Se hizo un silencio entre los dos, e Irene avanzó delante de él, intentando ocultar su cara decepcionada
-¿En verano nos veremos? -le preguntó, andando.
Dani le siguió el ritmo.
-Supongo que sí, yo puedo ir a tu casa en autobús, o si me saco el carnet de coche.
-Vale -le contestó Irene, cabizbaja.-Enseguida vuelvo.
Se fue corriendo a su habitación a contarles a las demás lo que había pasado.
Escucharon atentamente hasta que acabó.
-Era de esperar Irene...tampoco pasa nada -comentó Nicol, intentando convencerla.
-Ya, pero, bueno, da igual, voy al baño un momento -respondió la otra.
Salió de la habitación y dejó la puerta medio abierta.
Iba ya de camino al baño, cuando se le olvidó una cosa, fue a abrir del todo la puerta, pero escuchó a Nicol:
-Es normal, se irá con una universitaria y ya está. Yo le animo, pero no durarán sinceramente.
Irene abrió la boca, dolida.
-Que poca confianza. yo creo que si que se quedará con ella -respondió Adel, defendiendo a su amiga.
Hubo silencio.
Detrás de la puerta, Irene decidió actuar, se quitó un par de lagrimas que le habían caído con el brazo y entró, con toda la naturalidad posible.
Adel detectó que algo iba mal, pues había tardado muy poco, pero no dijo nada, para ver si Irene decía algo por si misma.
-He oído lo que habéis dicho -confesó por fin la gimnasta.
-Lo siento pero es lo que creo -se apresuró a decir Nicol, realmente avergonzada.
-Da igual -respondió con poca convicción.
Carol y Mireya no estaban, habían ido a preguntar una cosa a unas chicas.
Irene se había quedado preocupada. ¿Como que no se pasaría nunca? Algún rato si que tendría, decía ella.
Suspiró, triste e intentó olvidar el tema. Tenía que disfrutar las pocas horas que le quedaban antes de irse de allí.
Cambió la cara y volvió a bajar.
Le dio un inesperado abrazo a Dani, fuertemente.
-Abrázame fuerte -murmuró ella, acordándose del libro que se había leído hace poco.
Dani la estrechó en sus brazos, feliz.
Dieron un corto paseo y luego se despidieron, quedando en que mañana se verían.
Más tarde, Irene fue a comer. Su última comida en aquel comedor en ese curso. Que rápido había pasado todo.
También vinieron las demás y bromearon entre ellas, rieron. Resumiendo: disfrutaron.
Se iban a dar un baño cuando recordaron que ya habían hecho la maleta y solo habían dejado fuera un pijama, la ropa para el siguiente día y su neceser.
Cambiaron de planes y se hicieron una sesión de fotos en todos los sitios del internado: sentadas en el césped, apoyadas en sus taquillas, en su habitación, en la sala común, mojándose los pies en la piscina... Y más sitios aún.
Se pasaron el resto de la tarde con las demás chicas de su curso, jugando, comentando los planes del verano, incluso vieron la puesta de sol.
Calló la noche y cenaron. Había una cena especial, bueno, especial tampoco, pero había hamburguesa y patatas fritas, algo que les gustaba a casi todos los alumnos. De postre, helado.
También, vino Mercedes y dio un discurso sobre el curso y que estaba muy agradecida, y que el curso que viene también sería así de bien. Se dejó unas cosas para decirlas mañana, ya con los padres.
Al acabar, los alumnos aplaudieron.
Subieron a la sala común y pusieron música, pero la gente poco a poco se fue. A las doce, ya se apagó y se fueron a dormir.
*****
-¡¿Qué puñetas pasa?! -gritó Nicol, levantada, a las tres y media de la mañana, super agobiada.
Una alarma se acababa de encender y no paraba de sonar  por todo el edificio.
Todas se despertaron y abrieron la puerta y vieron, que por el final del pasillo, había fuego, y se oía a alguien chillando:
-¡¡¡INCENDIO!!! 


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¡Chicas! ¿Os esperabais esto? 
Este es el penúltimo capitulo. 
¿Os ha gustado?
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Muakis

viernes, 1 de noviembre de 2013

Cap.76-Galletas y...agua

Semanas después, ya la primera semana de Junio, los alumnos estaban entusiasmados: ¡el verano ya llegaba!
Sin embargo, Adel, Nicol y Carol no habían recibido más pistas del misterioso/sa.
Dani e Irene seguían juntos y felices, aunque se veían menos ya que Irene tenía que estudiar.
Por otra parte, toda la gente estaba muy apenada, porque se lo había pasado muy bien ese curso y habían vivido un montón de cosas.
El sábado, propusieron ir al cine.
Fueron andando, y pagaron cada una su entrada
Se cogieron dos cubos grandes de palomitas, suficiente para todas:
Y también algún que otro refresco.
Fueron hasta la sala en que les había tocado: la 6.
Se equivocaron varias veces de asientos, hasta que encontraron el indicado.
-Esto de subir y bajar cansa, oye -bufó Natasha, que era una de las que llevaba un cubo de palomitas, y había tenido que hacer malabarismos para que no se le cayeran mientras subían y bajaban por las filas corriendo.
Quedaba un poco para que empezara, así que se quedaron charlando un poco, hasta que, unas chicas de unos alrededor 20 años, que tenían adelante, se quejaron:
-¡Callar ya!
-Pero si aún están en anuncios -rechistó Nicol.
-¿Y qué? No nos hagáis llamar a seguridad.
-¿Qué decís de seguridad? Mirad, cuando empiece la peli nos callaremos y ya está -sentenció Natasha, que no le apetecía buscar problemas.
Todas se quedaron hablando en susurros sobre el tema, hasta qye por fin empezó la película.
Todo iba bien, hasta que, se les cayeron un poco de palomitas en los asientos de las chicas de delante.
-¡Parad! -exclamó una.
-Ha sido sin querer -dijo Irene.
-Dios, que niñatas más insoportables -murmuró otra.
Empezaron a insultarse, hasta que, entró una dependienta del cine y les echó a todas.
-No es justo -decían algunas, realmente fasitidiadas.
Salieron del cine a medio ver la película y pensaron que planes podían hacer sentadas en un banco mirando al horizonte.
De repente, Natasha, sacó el móvil y puso la canción: Miss Movin On, se levantó y empezó a cantarla y a bailarla, como si nada.
-Natasha, por favor, para -le pidió Nicol, avergonzada.
Natasha, le respondió, diciendole un "good bye" que venía de la canción.
Adel se unió a cantar.
-Dios, que vergüenza ajena... -murmuró Irene, mirando de un lado al otro.
-I, never be that girl again -cantaban, mientras, algunas personas que pasaban de la calle se paraban a escucharlas.
Pasó una señora de unos 60 años, y les dejó un euro en el suele, sin antes decir:
-Lo hacéis muy bien muchachas, suerte.
Nicol, Carol e Irene estaban realmente sorprendidas.
La canción acabó y Natasha dio un gritito de felicidad, ella no había hecho eso por dinero, sino para divertirse.
Puso Wings y comenzó de nuevo a cantar.
Irene, estaba admirando a su amiga, la iba a echar de menos de verdad. Y, cantaba bien.
-Your words,  don't mean a thing, and I'm not listening, Keep talking all I know is -cantaban.
Carol se levantó y se unió también. Alguna gente pasaba y las miraba extrañado, otras les tiraban alguna que otra moneda.
Tras dos canciones más, pararon a ver cuanto dinero habían recogido.
-¡6 euros! -exclamó Natasha, sonriente.
-Tres para cada una.
Se los repartieron, mientras Irene y Nicol flipaban.
-¿Ahora os arrepentís de no haber cantado chavalas? -preguntó Carol.-Somos la próxima girlband, me lo veo venir.
Nicol giró la cabeza, y puso los ojos en blanco de broma.
Se fueron de allí y volvieron, un tanto aburridas.
*****
Los días pasaban rápido, ya quedaba solo una semana para terminar el curso.
Los exámenes ya los habían hecho, ahora lo único que les quedaba era aguardar hasta el último día.
Un día de esos, por la tarde, Carol encontró un sobre, ese que tanto ansiaba encontrar desde hace unas semanas.
Corrió hasta él, y lo cogió. Lo abrió y leyó:
-Se acabaron los regalos, ¿queréis saber quién soy? Venid hoy por la noche a la piscina, en bañador...
Carol se quedó pensativa. ¿A la piscina, en bañador? ¿¡Para qué?!
Fue a avisar a Nicol y a Adel, que se quedaron igual que ella.
Tenían que pensar, pero deprisa, ya que eran las siete, y más o menos, por la noche se referiría a las nueve y media, aproximado.
Mientras tanto, en la cocina del internado, Irene y Claudia se ponían perdidas de harina intentando hacer un pastel.
-¿No podemos buscar una receta más fácil? -preguntó Claudia, soplando un mechón que tenía en la cara, manchado de harina.
-Bueno, vale, será mejor -contestó Irene.
Se lavaron las manos y buscaron recetas en Internet.
-¡Mira esta receta de galletas! -exclamó Irene-Es muy fácil de hacer.
Claudia asintió y se pusieron manos a la obra.
Sacaron todos los ingredientes indicados y los pusieron en el orden indicado.
Batieron hasta que les quedó una masa homogénea y Claudia dijo:
-Ahora tenemos que meterla en la nevera media hora.
Y así hicieron.
A la vez que esperaban, merendaban unos croissants con leche.
Ya pasada la media hora, sacaron la masa, felices. Ahora llegaba la hora de usar los moldes.
Hicieron galletas con forma de corazón, algunas cuadradas, circulares...
Las metieron al horno y volvieron a esperar...

-¿Entonces vamos o no? -preguntó por quinta vez Adel, paseándose por la sala común.
-¡Sí! Yo quiero saber quién es, ¿En serio no tenéis curiosidad? -comentó Nicol.
-Claro que sí, pero en bañador, bueno, o bikini...
Los minutos pasaban y cada vez se acercaba más la noche.

-¿No crees que deberíamos decorarlas? 
-Sí, la verdad es que sí.
Se pusieron a buscar en la gran y amplia cocina alguna cosa para decorar las galletas.
Miraron en varias alacenas, y ya se iban a rendir cuando, Claudia, exclamó:
-¡Aquí hay! Mira.


Contentas de poder decorarlas, comenzaron.
Añadieron también un poco de azúcar glass, y el resultado fue magnífico:


-¡Han quedado genial! -chillaron entusiasmadas.
-Esto se merece una foto -dijo Irene, sacando su móvil.
Hicieron la foto, y luego, cada una cogió una galleta y la probó.
-Mmmm...
-Aunque, creo, que ahora, vamos a tener que lavarnos el pelo -se rió Claudia, señalando un mechón de su pelo, blanco.
Guardaron las galletas en un tupper, y se fueron de la cocina.
Pero Irene no entró en el edificio residencial.
-¿No vienes?
-No, ahora en un rato iré, voy a buscar a mi entrenadora -mintió.


Ya estaban listas. Nicol se había puesto uno de sus bañadores de natación y chanclas.
Carol y Adel bikini. 
Se miraron entre ellas y asintieron, ya eran las nueve y cuarto, en cinco minutos saldrían hacia la piscina cubierta.
Esos cinco minutos se les hicieron interminables.
Pero, al fin pasaron.
Salieron nerviosas de la habitación y llegaron a la piscina.
No había nadie, buscaron por los vestuarios, pero nada.
-Esta claro que aquí n...¡AHAHA! -chilló Nicol, que ahora estaba en el agua porque alguien le había empujado.
A Adel le pasó lo mismo.
Carol miró a ambos lados, pero, con la oscuridad no se veía mucho.
Notó que la cogían y, después, ya estaba metida en el agua, buscando alguna explicación.
Segundos después, las luces se encendieron y aparecieron Irene y Natasha, riéndose.
-¿¡Eráis vosotras!? -preguntó, incrédula Nicol.
-Sííí, jajaja.
-Pero, Natasha, tú al principio buscaste con nosotras, a los cerditos -dijo Carol.
-Ya, pero en realidad ya sabía quien era, por eso, en vez de seguir con el juego yo, siguió Adel...
-¿Adel, lo sabías?
-¡Sí, jajajaja! -rió ella.
-Pues has actuado muy bien...
-¿Y de donde sacasteis todo?
-Eso es secreto.
Se quedaron en silencio, y Nicol dijo, entregando la mano a Irene:
-¿Me ayudas a salir? 
Irene aceptó y le dio su mano, pero, Nicol, tiró hacia ella e Irene también se cayó al agua.
-¡Idiota!
Natasha, se tiró voluntariamente al agua.
Se rieron todas ante la situación en la que estaban.
Como se iban a echar de menos unas a otras...

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¡Hooooola! ¿Os esperabais esto? Jeje.
¿Que os ha parecido? Lo he alargado un poco, está mejor así no?
Decídmelo en los coments.
Muakis